Anthocharis belia, 7 de abril 2010 |
Como un regalo de primavera todavía vuela este lepidóptero muy cerca de Úbeda (24 abril 2016). La mariposa aurora, también llamada "punta anaranjada" por el vistoso y dorado ápice alar del macho, escasea si matamos su planta nutricia, Biscutella, una mostaza silvestre que se llama así por su fruto, que tiene la forma de dos copas pegadas por la base.
A la vista de la gracia de sus escamas (Anthocharis belia es su nombre científico), sus colores les permiten mimetizarse fácilmente con las plantas en las que liban, aquí en los botones de un jamargo, y a veces se posan y dan tiempo al fotógrafo, en éxtasis reproductor y estético, para hacer su retrato.
Quién diría que las larvas, si les falta comida, se vuelven caníbales. ¡Cosas de la naturaleza, que a veces salta de lo sublime a lo espantoso, y viceversa!
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