Características: Pertenecen al suborden Caelifera, que incluye a los "saltamontes de cuernos cortos", a diferencia de los Ensifera (grillos, saltamontes de cuernos largos). Suelen prosperar en hábitats cálidos y secos, como praderas, estepas rocosas, campos de cereal y bordes de caminos.
Importancia ecológica: Son herbívoros polífagos. En condiciones de alta densidad de población, algunas especies pueden llegar a ser consideradas plagas para la agricultura, afectando a cultivos como cereales, pastos y leguminosas.
Morfología: Como otros ortopteros, presentan dimorfismo sexual, con las hembras generalmente más grandes que los machos.
Calliptamus barbarus, saltamonte de los campos |
Etimología: "Calliptamus" proviene de las palabras griegas κάλλος (kállos), que significa "belleza" o "hermoso", y πταμος (ptamos), que significa "volador" o "el que vuela". Por lo tanto, el nombre se traduce aproximadamente como "hermoso volador", probablemente en alusión al vuelo que realiza el insecto.
Calliptamus barbarus, agosto 2009 |
Calliptamus barbarus (Saltamontes de los campos)
Calliptamus barbarus es una de las especies del género más comunes y extendidas en la Península Ibérica y en la región mediterránea de Europa, así como en el norte de África y parte de Asia Central.
Descripción: Saltamontes de tamaño pequeño a mediano, con una longitud que rara vez supera los 25 mm. Su coloración es variable, a menudo con tonos grises o marrones que le permiten camuflarse bien en su entorno. A veces puede mostrar una coloración rosácea o rojiza en sus alas posteriores, visible durante el vuelo, similar a la de otras especies del género.
Hábitat y distribución: Prefiere los terrenos secos y abiertos. Es muy común en praderas, campos de cereal, matorrales y bordes de caminos. Relevancia antrópica: Aunque generalmente no causa problemas a gran escala, en ciertas condiciones de alta densidad poblacional, puede convertirse en una plaga local para los cultivos.
Taxonomía: Fue descrito por primera vez por O. G. Costa en 1836. Se han reconocido varias subespecies, como Calliptamus barbarus barbarus.
Etimología: El nombre "barbarus" (bárbaro) proviene del latín y suele usarse en zoología para referir a la procedencia del animal. En la antigüedad, la palabra "bárbaro" se usaba para describir a aquellos pueblos que no hablaban latín o griego, es decir, que vivían fuera del mundo grecorromano. En zoología, a menudo se usa para indicar un origen extranjero, exótico o, en este caso, posiblemente para referirse a su distribución en tierras consideradas "bárbaras" por los antiguos romanos, como el norte de África (barbaria en latín) o regiones más allá del Imperio Romano.